Tu Propia Realidad Personal

Tu Propia Realidad Personal

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Tu Propia Realidad Personal

“Un desarrollador es alguien que quiere construir una casa en el bosque. Un medioambientalista es alguien que ya tiene una casa en el bosque.”

  • Denis Miller

Pensamos que todo el mundo mira lo que nosotros vemos. ¿Cómo podrían no hacerlo?

Y pensamos que todo el mundo creería lo que nosotros creemos si tan sólo lo pudiéramos explicar claramente.

Pero esto casi nunca es cierto.

Dos personas están paradas una al lado de la otra observando una escena.

Una persona mira dolor e injusticia y desesperación.

La otra mira oportunidad y propósito y aventura.

La primera persona mira a la otra como un soñador impráctico.

La segunda mira a la primera como un pesimista quejoso.

Todas las personas tienen un schema, un sistema de creencias acerca de cómo funciona el mundo. Tu schema es el lente al través del cuál miras y sientes el mundo a tu alrededor. Dicta la realidad que percibes. No me malinterpretes. No estoy diciendo que tu schema cambia los hechos. Sólo cambia cómo los interpretas.

Dos veces a la semana, durante las últimas semanas, Ray Bard ha estado enviando manojos de aproximadamente 20 citas a más de 1,000 jueces de citas para que nos ayuden a calificar su impacto. La semana pasada, Ray nos dijo lo que todo publicista ya conoce.

“Siempre hay algunas sorpresas respecto a cuáles citas tienen mayor calificación. Pero hay algo que ya no me sorprende. Es el rango de opiniones. Por ejemplo, en la última Colección, alguien dijo: `Parece que estás raspando el fondo de la olla para encontrar citas´, y la siguiente persona dijo: `Tantas buenas citas. Todas ganan para mí.’”

Si tu mensaje tiene el poder de mover gente, puedes estar seguro que no va a mover a todos en la dirección deseada. Si no estás preparado para sonreír caminando a través de las reacciones negativas de amigos, empleados y asociados con buenas intenciones, nunca vas a poder construir un mensaje que penetre el relajo de este mundo sobre comunicado.

El noventa por ciento de todos los libros publicados cada año son de no-ficción. Pero los libros de ficción – el 10 por ciento – conforman el 90 por ciento de todas las ventas de libros. En las palabras de Tom Robbins: “La gente escribe sus memorias porque les hace falta imaginación para inventarse cosas.”

Los personajes ficticios en las películas, novelas y shows de TV parecen reales aún cuando sabemos que no lo son. Sabemos que la ficción no es cierta y, sin embargo, la tratamos durante un momento como si lo fuera. Somos simultáneamente ingenuos, creyéndonos lo que nos dicen, y astutos, conscientes del engaño. 

Hace siete semanas te conté acerca de la investigadora de persuasión, Maria Konnikova, cuyo trabajo está fondeado por dos universidades, Harvard y Columbia. Maria dice que mientras más una historia nos transporte a su mundo, más fácil nos la vamos a creer. El arco de una historia se sobrepone a los hechos de la lógica. Cuando nos entretiene una historia, tendemos a estar de acuerdo con las creencias que esa historia implica.

En resumen: una historia puede cambiar nuestro schema.

No es un accidente el que Jesús haya enseñado en parábolas.

La mayoría de nosotros disfruta ser halado por una historia. Pero algunas personas no tienen gusto por la ficción o la fantasía o el ingenio.

Lo que estás a punto de leer es real y me sucede todo el tiempo. Mi amigo Jerry recibió este mensaje de voz justo la semana pasada:

“Me da vergüenza por usted porque está entregándole su negocio a alguien tan joven, que tiene una voz que me hace quitar el anuncio. Tengo que ir a la radio y apagarlo. Me lastima los oídos. Y los anuncios son infantiles. No son profesionales. No, no son profesionales. No utilizaría su compañía para nada. Lamento haberla utilizado para algo. Le dije al mundo que lo hiciera. Les he mandado millones de clientes. Me da vergüenza y pena. Lamento tener que hacer esta llamada.”

¿Te gustaría saber qué disparó esta preocupación?

[SFX –  grillos, camiones pasando]
ANNCR:
Dos personas esperan que el teléfono suene en un camión de Allbritten Calefacción y Aire Acondicionado.

JERRY: Uhhhh,. ¿Andrea?

ANDREA: ¿Sí Papá?

JERRY: Se que te he alentado a comenzar a tomar desiciones más grandes para Allbritten, como si fueras la dueña…

ANDREA: Sí y lo estoy haciendo bomba, Papá.

JERRY: [con duda] Sí… bueno, este nuevo lema de la compañía…

ANDREA: ¡Verdad que es genial! Nuestros clientes vienen primero

JERRY: Bueno, sí, pero puede ser un poco confuso.

ANDREA: ¡Qué!

JERRY: Tienes que tener empleados felices antes de tener clientes felices.

ANDREA: Yo sé. Pero no es un muy buen lema decir: “Allbritten, en donde los clientes vienen segundo”, o, “Allbritten, en donde los clientes son el número Dos.”

JERRY: Sigue pensando. Eres una chica lista.

ANDREA: ¿Me puedes dar alguna pista?

JERRY: Nope.

ANDREA: ¿Por favooooooor?

JERRY: Nope.

ANDREA:[SFX – teléfono suena y contestan]
Gracias por llamar a Allbritten en donde empleados felices hacen clientes felices.

JERRY: ¡Por Dios, lo tiene.

DEVIN: Allbritten Calefacción y Aire Acondicionado.

ANDREA: Dos nueve dos

JERRY: Cuarenta y nueve diecinueve.

er?” “Yes.” “And she’s really taking over the company?” “Yes.”

Esta campaña exitosa y liviana te deja conocer a los dueños de la compañía a través de unas conversaciones cómicas y profundas. En un Show de Hogares y Jardines reciente, Jerry y Andrea fueron la atracción principal por accidente cuando se corrió la voz en el centro de convenciones que ellos estaban en persona. Incontables personas llegaron, citaron sus anuncios y les preguntaron si se podían tomar una foto con ellos. “¿Andrea de verdad es tu hija?”, “Sí.” “¿Y de verdad está tomando las riendas de la compañía?” “Sí.” 

Las conversaciones en los anuncios son ficticias, pero las personas son reales.

Y tuvieron un año muy, pero muy bueno.

Roy H. Williams

 

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