Archive May 28, 2018

Una extraña clase de suerte

Una extraña clase de suerte

Comencé a perder el pelo cuando tenía 19 años. Para cuando tenía 21, parecía de 30.

Fue lo mejor que me pudo haber pasado.

La gente lo toma a uno en serio cuando uno parece adulto y yo necesitaba que me tomaran en serio.

Vendía anuncios de la estación de radio más pequeña de Tulsa, Oklahoma. Estábamos hasta el fondo en al número 23 en una ciudad de 23 estaciones. Teníamos un 0.5 de la participación durante el Cuarto de Hora Promedio. Esto quiere decir que de cada 200 radios que estaban encendidos, sólo uno de ellos estaba encendido a mi estación.

Fue lo mejor que me pudo haber pasado.

En cualquier momento, habían entre 500 y 800 personas escuchando mi estación. Pero el número total de diferentes personas a las que alcanzábamos en una semana era de aproximadamente 18,000. ¡Bravo! Estaba más que feliz. No había un sólo negocio en nuestra ciudad de 1,000,000 de personas que no pudiera necesitar 18,000 clientes adicionales.

Todo lo que necesitaba averiguar era qué decir para hacer que mis 18,000 personas recordaran — y prefirieran — a mi anunciante. No puede decir con certeza que yo sabía que el éxito se encontraría construyendo un mensaje persuasivo más que en la selección de la audiencia “correcta”, pero mi memoria me muestra a un niño sentado en un salón de clases vacío, leyendo libros durante el receso en vez de jugar con los demás niños en el patio de juegos.

Fue lo mejor que me pudo haber pasado.

Sí, yo sé que he dicho “Fue lo mejor que me pudo haber pasado” tres veces y que no pueden ser TODAS esas cosas “lo mejor”, pero no me siento con ganas de clasificarlas en la “1a Mejor”, “2a Mejor”, etc., así que, sígueme la corriente, ¿está bien?

Restringí mis llamadas de ventas a negocios que eran tan diminutos que no podían pagar otra publicidad más que mi nada de estación de radio diminuta. Cuando estas personas creyeron en mí y me hicieron un cheque, me estaban dando su sangre. Si mis planes para ellos hubieran fallado, mis clientes no hubieran podido pagar la renta. No hubieran podido mandar a sus hijos a la escuela con almuerzo. No hubieran podido pagar su energía eléctrica. Cuando te enfrentas a ese tipo de consecuencias, te quedas despierto por las noches tratando de entender cómo hacer que funcionen los anuncios que vendiste, porque no hay nadie con quién puedas compartir la culpa. Estás sólo tú.

La Culpa, el Dolor y el Remordimiento son profesores poderosos.

Averigüe muy rápido cómo hacer que funcionara la publicidad.

Y lo que me enseñaron la Culpa, el Dolor y el Remordimiento fue muy diferente de lo que se enseña en las universidades.

Pocos profesionales de mercadeo van a ser jamás totalmente responsables del resultado de las campañas publicitarias que ayudaron a crear. La mayor parte de personas en mi profesión van a la universidad, obtienen un grado y luego se convierten en una tuerca en una maquinaria de publicidad. Sus fracasos pueden ser atribuidos a una amplia variedad de fuerzas fuera de su control. Sus plumas jamás están llenas con la sangre de las familias para quienes escriben.

Mi dueño de estación esperaba que nuestra pequeña estación pudiera hacer alrededor de US$11,000 al mes. En 18 meses, mi facturación personal estaba promediando US$51,000 al mes. Mi salario base era US$800 al mes. Y obtenía un 15% de comisión. Haz las cuentas.

Me pasé la primera parte de mis veintes como un joven felizmente casado y quedándome rápidamente calvo con diez mil historias en su cabeza y una pluma llena de sangre en sus bolsillos. Luego, a los 26 años, me hicieron Gerente General de una estación mucho más grande.

Ya no pasaba mis días hablándoles cara-a-cara a los dueños de los negocios y construyendo historias. En vez de eso, me pasaba con la mirada perdida sobre hojas de cálculo y hablaba por teléfono con oficiales corporativos y contadores y escuchaba a 32 empleados quejarse porque me confundían con sus mamás.

Seis meses después, les dije: “Pueden quedarse con el queso. Sólo sáquenme de la trampa.”

Con el apoyo incondicional de la Princesa Pennie, me convertí en un escritor de anuncios y negociante de medios independiente. Adapté mis historias para encajar en las vallas de las carreteras y los anuncios de TV durante el Superbowl y las páginas en el internet.

Pero algunas cosas no cambian nunca. Treinta y cuatro años después de decir que “no” a las hojas de cálculo y las políticas corporativas, mis relaciones continúan siendo de uno-a-uno con los dueños de los negocios, nunca con las compañías que poseen.

Yo no creo en el destino.

Yo creo en las decisiones y las consecuencias.

Yo creo que cada uno de nosotros escoge en qué nos convertimos.

¿En qué escogiste convertirte?

¡Si el plan A no te está funcionando, considera el plan B o el C o el D!

Lo nuevo que escoges trae nuevas consecuencias.

¿Verdad que la vida es maravillosa?

No te olvides de vivirla.

Roy H. Williams

Los opuestos en pareja son una expresión de dualidad

Los opuestos en pareja son una expresión de dualidad

Una cosa no puede existir sin su opuesto. Es por esto que una declaración positiva — sin la negativa correspondiente — usualmente es una trivialidad.1

Cada protón tiene su electrón.

Cada verano tiene su invierno.

Cada Yin tiene su Yang.

Cada arriba, su abajo.

Cada adentro, su afuera.

Cada justicia, su misericordia.

“El opuesto de una afirmación correcta es una afirmación falsa.

Pero lo opuesto de una verdad profunda puede muy bien ser otra verdad profunda.”

– Niels Bohr

Niels Bohr no era un filósofo. Era un científico que ganó el Premio Nobel a la Física.

La dualidad, en la forma de opuestos en pareja, es esencial a la comunicación de alto impacto.

No es suficiente explicar en qué crees.

También tienes que explicar en qué no crees.

No es suficiente explicar lo que defiendes.

También tienes qué explicar que no defiendes.

Te vi hacer una mueca allí. No te gusta “ser negativo”. ¿Verdad?

Crees en la abundancia.

Crees en el optimismo.

Crees en la justicia y la paz.

Suenas a una tarjeta de Hallmark.

Ahora dime si yo estoy siendo “negativo”.

Yo estoy en contra de la pobreza.

Estoy en contra de la desesperanza.

Estoy en contra de los abusivos.

Sueno como alguien que pueda hacer una verdadera diferencia.

No sólo nos digas qué es lo que incluyes.

Dinos también qué es lo que excluyes.

No sólo nos digas qué eres.

Dinos qué no eres.

“En Kesslers, hacemos mejor lo de los diamantes, porque sólo hacemos lo de los diamantes. No vendemos relojes ni perlas ni cadenas de oro. Pero vendemos todos los tipos de anillos de compromiso que se hayan diseñado jamás.”

En Aires Acondicionados Goettl, hacemos las cosas de la forma correcta, no fácil.”

“El magnesio Jigsaw es un mineral, no una vitamina. Y entrega energía real, no energía de cafeína.”

Esta es la razón la cual tus fotos nunca se parecen verdaderamente a ti.

Te ves la cara en el espejo todos los días. Miras fotos de ti sólo de vez en cuando. Pero el espejo te enseña una imagen al revés. El “tú” que tus amigos miran es el opuesto de la imagen que tú miras.

Esta es la cara que tú miras, En mi mente, yo me miro así.

pero para mí, esta cara Es la cara que veo al espejo.

es extrañamente poco familiar.

Si sólo hablas de lo que miras desde tu perspectiva, tienes una mala comunicación con todos los que sólo miran lo opuesto.

La comunicación comprehensiva siempre enseña ambos lados:

El anverso y el reverso.

El arriba y el abajo.

Lo que se deja adentro y lo que se queda afuera.

¿Tienes la apertura de mente para hacer esto?

¿Tienes la valentía?

Roy H. Williams


“trivialidad

1. f. Cualidad de trivial (‖ común).

2. f. Cosa sabida de todos.

3. f. Cosa que carece de importancia.

4. f. Dicho o especie trivial.”

– Diccionario de la Real Academia Española

El Campus Roycroft y la Gruta Bohemia

El Campus Roycroft y la Gruta Bohemia

Sin lugar a dudas, algún día dirán: “Inspirados por Roycroft y la Gruta Bohemia, Pennie y Roy Williams construyeron la Academia del Mago”.

Pero van a estar equivocados.

Sí, la Princesa y yo — con la ayuda de cientos de buenos amigos alrededor del mundo — comenzamos a construir el campus de la Academia del Mago en el 2004. La parte que está “equivocada” es que nos inspiramos en Roycroft y la Gruta Bohemia.

Sin embargo, este error es fácil de disculpar, porque saltar a conclusiones es lo que nos hace a los humanos tan adorables.

Elbert Hubbard era un mercadólogo cuya revista,, The Philistine, era leída por suscriptores alrededor del mundo hace 120 años. De igual forma, mi Memo del Lunes por la Mañana y los digresiones de Indiana Beagle son leídas por suscriptores alrededor del mundo.

Pero Elbert Hubbard no me inspiró a convertirme en mercadólogo o a escribir estos Memos de los Lunes por la Mañana. Y estoy bastante seguro que, de igual forma, Indy Beagle se pasea por la madriguera del conejo por sus propias razones. Elbert Hubbard publicó un libro acerca de publicidad pero yo no escribí mi trilogía del Mago de la Publicidad por él

Elbert y su esposa, Alice, comenzaron a construir el Campus Roycroft como un enclave de escritores y artistas en East Aurora, Nueva York, en 1895.

Pero Pennie nunca había escuchado hablar de los Hubbards o de su Campus Rocroft cuando decidió construir la Academia del Mago. Yo sé que eso es verdad. Yo estaba allí.

Aun así, existen marcadas similitudes entre nuestras organizaciones.

La Academia del Mago tiende un puente sobre la brecha entre los negocios y las artes. Como los Roycrofters que nos precedieron, nosotros celebramos el estudio de las artes para mejorar los negocios.*

El Club Bohemio de San Francisco comenzó a construir la Gruta Bohema en 1878. Los “Bohemios” en esos días eran escritores y artistas. Pero las personas de negocios querían estar con ellos y se sintieron atraídos inmediatamente al club.

Oscar Wilde fue a La Gruta en 1882. Más adelante, dijo: “Cuando los banqueros se reúnen, hablan acerca de arte. Cuando los artistas se reúnen, hablan acerca de dinero”.

Piensa en el campamento anual de la Gruta Bohemia como la Conferencia TED original.

Una invitación a La Gruta sigue siendo uno de las entradas más difíciles de conseguir. La seguridad es extremadamente estricta. Los invitados a la Gruta Bohemia de ahora son ganadores del Premio Nobel, artistas y autores destacados, senadores y directores de compañías Fortune 500.

Es interesante, la Academia del Mago atrae a muchas de las mismas personas, pero en una escala menor.

El lema oficial del Club Bohemio es una frase tomada de Sueño de una Noche de Verano de Shakespeare: “Arañas tejedoras, no vengan acá”. Lo que significa: “Los negocios y cualquier intento de hacer `conexiones´ tienen que dejarse afuera. Este es un lugar de escape.”

Al igual que la Gruta Bohemia, la Academia del Mago es un lugar de escape, renovación e inspiración para personas que luchan contra gigantes.

¿Tienes un sueño, una empresa, una misión, un propósito que ocupa tu corazón y manos y mente?

Ven. Tú tienes una tribu. Pasa tiempo con nosotros. Serás un luchador más fuerte cuando te vayas.

Roy H. Williams

  • “Toda la literatura es publicidad. Y todos los anuncios genuinos son literatura. El autor publicita personas, momentos, lugares, hechos, eventos y cosas. Su atractivo es al alma universal humana. Si no conoce las pulsaciones del corazón de hombres y mujeres, sus esperanzas, alegrías, ambiciones, gustos, hechos y deseos, su trabajo no va a interesar a nadie más que así mismo y sus amigos que lo admiran. La publicidad se está convirtiendo rápidamente en un arte refinado. Su tema es el deseo humano y en dónde, cuándo y cómo pueda ser gratificado.”

– Elbert Hubbard, de The Cambridge Chronicle, 26 de agosto, 1911

Tres personas que recuerdas

Tres personas que recuerdas

Los problemas le pasan a todo el mundo.

“Nadie, mientras se mueva entre las corrientes caóticas de la vida, está libre de problemas.”
– Carl Jung

Pero no te preocupes.

“Preocuparse es el interés que pagan los que piden problemas de prestado.”

– George Washington

En serio. No te preocupes.

“Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.”

– Jesús, en el 6o capítulo de las Buenas Nuevas de Mateo

Porque yo lo tengo controlado.

“En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”

– Jesús, en el capítulo 16 de las Buenas Nuevas de Juan

Y yo soy tu amigo.

“Los amigos demuestran su amor en los momentos de problemas, no en la felicidad.”

– Eurípides

Los problemas son la luz de búsqueda en la oscuridad que te enseña el corazón de una persona.

“Nunca olvidas a tres personas:

La persona que te ayudó cuando tenías problemas,

La persona que te dejó cuando tenías problemas,

La persona que te puso en problemas.”

– Randy Phillips

Y alguna vez esa luz se te refleja a ti de regreso.

“Si pudieras patear en el trasero a la persona responsable de la mayor parte de tus problemas, no podrías sentarte en un mes.”

– Theodore Roosevelt

Pero, al final, el sol sale, la mañana viene y es un día completamente nuevo.

“Espera los problemas como parte inevitable de la vida y repítete a ti mismo las palabras más consoladoras de todas: `También esto pasará´.”

– Ann Landers

Roy H. Williams

“Ya nadie escucha la radio ahora”

“Ya nadie escucha la radio ahora”

“La radio está muriendo.”

“La radio está muerta.”

“Mis amigos y yo no escuchamos radio. Nosotros (blah, blah, blah) en vez de eso.”

“Nadie escucha la radio ahora, especialmente en lugares súper tecnológicos como San Francisco, en el corazón de Silicon Valley. Es cierto, ¿verdad?”

¿Verdad?

Unos párrafos después de éste, te voy a decir exactamente a cuántas personas estamos llegando en San Francisco cada semana y precisamente cuántas veces el sanfranciscano promedio escucha nuestro anuncio por la radio.

Pero, primero, démosle un vistazo a por qué podemos confiar en esos números.

Has escuchado acerca del Gallup Poll y has escuchado acerca de los Nielsen Ratings. Y, por supuesto, entiendes de metodología científica de encuestas y análisis estadístico.

Nielsen mide los hábitos de escucha de radio de San Francisco en forma continua, utilizando un tamaño promedio de 2,400 adultos.

¿Oh? Dices que no entiendes de metodología científica de encuestas y análisis estadístico? ¿No sabías que el Gallup Poll usualmente se basa en sólo 1,000 entrevistas? ¿Y que esas 1,000 personas representan a la población entera de los Estados Unidos con un alto nivel de precisión?

“¿Cómo puede una encuesta de tan sólo 1,004 personas representar a 260 millones con tan sólo un 3 por ciento de margen de error?” Este es el nombre de un artículo que encuentras en los archivos en línea de Scientific American. En este artículo, el Profesor Andrew Gelman de los departamentos de estadística y ciencias políticas de la Universidad de Columbia dice: “El margen de error depende inversamente de la raíz cuadrada del tamaño de la muestra.”

Esto es lo que está diciendo el Profesor Gelman: Mientras más pequeño el universo, más grande tiene que ser el porcentaje de ese universo que se indaga. Si quieres conocer las opiniones de un universo de 10 personas, tienes que preguntarles a las 10.

Mientras más grande el universo, más pequeño el porcentaje de ese universo que se debe indagar. Para medir con precisión las opiniones de 700 personas, debes preguntarles a 250 de ellas. Pero una medida de muestra de tan solo 384 personas mide las opiniones de 1,00,000 de personas con un idéntico grado de precisión.

Cuando la organización Gallup quiere ser quisquillosamente precisa, suben su tamaño de muestra a 1,500 personas. Y eso es suficiente para medir los Estados Unidos entero.

Esa muestra de Nielsen de 2,400 personas en San Francisco ya no se mira tan pequeña, ¿verdad? Por cierto, el reporte anual de Nielsen Holdings indica que ellos tuvieron ganancias de US$6,572,000,000 el año pasado. Así es. Seis y medio millardos de dólares para monitorear nuestros hábitos de ver tele y escuchar radio.

Digo “monitorear” porque Nielsen no confía en nuestros recuerdos o nuestras motivaciones. Nielsen le da a cada uno de esos 2,400 sanfranciscanos un pequeño aparato electrónico que deben llevar consigo todos los días. Este “Metro Portátil de Persona” detecta las estaciones de radio que escuchas y anota los momentos precisos en los que escuchas cada estación, cada día. Se envían estos datos a Nielsen y sirven como la base para su reporte de audiencia.

Los aparatos electrónicos no mienten.

Nielsen’s methodology and math are irrefutable and unimpeachable.

I say we can trust Nielsen’s numbers. What say you?

We recently negotiated a weekly schedule on the broadcast radio stations of San Francisco. That schedule reaches 43% of the total (18+) population of that city an average of 2.7 times each week, 52 weeks a year, at a total cost of 47 cents per person/per year. This means each of more than 2.5 million San Franciscans will hear our full-length message an average of 140 times in 2018. (52 x 2.7 = 140.4)

About 50 percent of America spends enough time listening to the radio each week that you can efficiently and affordably reach those customers with sufficient repetition to become a household word, an intimate component of their daily life.

La metodología de Nielsen y las matemáticas son irrefutables e inapelables.

Yo diría que podemos confiar en las cifras de Nielsen. ¿Qué dices tú?

Recientemente negociamos una programación semanal en las estaciones de radio de San Francisco. Esa programación alcanza al 43% del total de la población (18+) de esa ciudad un promedio de 2.7 veces cada semana, 52 semanas al año, a un costo total de 47 centavos por persona/por año. Esto significa que cada uno de los más de 2.5 millones de sanfranciscanos va a escuchar nuestro mensaje entero un promedio de 140 veces en el 2018. (52 x 2.7 = 140.4)

Alrededor del 50 por ciento de los Estados Unidos pasa suficiente tiempo escuchando radio cada semana como para que puedas alcanzar de forma eficiente y económica a esos clientes con la repetición suficiente para convertirte en una palabra común, un componente íntimo de sus vidas diarias.

Esta familiaridad acelera y potencia cada esfuerzo adicional para vender: email, en línea, al aire libre, voz-a-voz en el teléfono y cara-a-cara en la sala de ventas.

En el primer capítulo del libro del Génesis, está escrito 11 veces “Y Dios dijo…”

La única descripción que nos dan de Dios en el libro del Génesis es que él habló un mundo a la existencia. Pero luego, en el verso 26, dice que estamos hechos a su imagen.

Yo creo que es por esto que podemos hablar futuros posibles a los corazones y mentes de otros humanos. Es un arte que llamamos “vender”. Y funciona maravillosamente bien en la radio.

Para mí está bien si crees que la Biblia es un cuento de hadas. Pero si crees que las cifras de Nielsen son un cuento de hadas, estás en una clase especial de negación.

¿Podría sugerirte humilde y respetuosamente que te saques la cabeza del trasero y mires la luz?

Eso era para que fuera una línea divertida e inesperada. Si te lo tomaste de otra forma y te enojaste, lo siento. Por favor dale saludos a tu colon de mi parte.

Roy H. Williams