La Otra Forma de Excelencia
(Parte Dos)
Aquí hay un link al Memo del Lunes por la Mañana de la Semana Pasada. La Otra Forma de Excelencia Parte Uno.
“Cualquier cosa que valga la pena ser hecha, vale la pena hacerla mal.”
Estas son las palabras de un empresario que tiene una idea medio formada y un sueño más grande que el amanecer. Él cree que si saltas, va a aparecer una red. Los empresarios tienen confianza en su inteligencia callejera que sacan de sus fracasos y su visión futura optimista les permite ver más allá de la incómoda y fea fase de “prueba-tu-concepto” a la innovación brillante que está más allá.
“Cualquier cosa que valga la pena ser hecha, vale la pena sobre-hacerla.”
Estas son las palabras de un Líder fuerte: el campeón de la tribu, la perfecta personificación del compromiso. Se puede confiar en él para que piensen sobre la marcha, improvisen cuando sea necesario e infundan en sus compañeros su pasión. Si cruzas a la derecha, hacia la Excelencia a través de la Espera y Respuesta – vas a necesitar líderes fuertes.
“Cualquier cosa que valga la pena ser hecha, vale la pena hacerla bien.”
Estas son las palabras de un Gerente efectivo: el guardián de la guía de estilo, el protector de status quo. Se puede confiar en él para implementar procesos y asegurarse que los empleados se adapten a las políticas y sigan procedimientos. Si cruzas a la izquierda – hacia la Excelencia a través de la Planificación y Ejecución – vas a necesitar un gerente efectivo.
Los Gerentes y los Líderes son enemigos naturales.
El Gerente piensa que el Líder es imprudente e indisciplinado y desastroso. El Líder no puede decidirse si el Gerente es un robot cuadrado o un amargado cuenta centavos que fue destetado con un membrillo.
Los líderes florecen entre el caos y se sienten encadenados por el orden.
Los gerentes siente repulsión por el caos y se sienten con poder entre el orden.
La mayor parte de organizaciones son fundadas por empresarios, crecen con líderes y se optimizan con gerentes.
Las compañías construidas sobre apasionadas Espera y Respuesta son difíciles de sostener al largo plazo. ¿Puedes pensar en uno que haya mantenido el paso ligero y la luz de los ojos por más de una década o dos? La Espera y Respuesta muchas veces ceden el paso a la Planificación y Ejecución para que los sistemas y métodos y técnicas y procedimientos puedan ser creados, permitiendo que gente promedio pueda obtener resultados consistentes.
La gente excelente es difícil de encontrar, difícil de mantener y cara de pagar. Gente promedio hay por todos lados.
Si tu organización está sufriendo porque no puedes encontrar suficiente gente excelente, probablemente eres un líeder que necesita relegar un poco de su autoridad a un gerente, quien va a crear sistemas y políticas y métodos y procedimientos.
Sólo estoy diciendo.
Pero si tu organización se está sintiendo un poco estancada y fuera de contacto y detrás de los tiempos y sientes que necesita una transfusión de energía, probablemente eres un gerente que necesita dar un poco de su autoridad a un líder.
Un líder es un pleitista súper productivo, un artista que sabe cuáles reglas romper, cuáles procedimientos cambiar, cuáles políticas terminar y qué montaña escalar.
“Aprende las reglas como un profesional, para que puedas romperlas como un artista.”
Pablo Picasso
Verdaderamente existen dos caminos hacia la Excelencia.
Roy H. Williams
