
La gente en museos se detienen a ver pinturas que tienen gente en ellas, pero siguen de largo de las pinturas que no tienen gente.
El noventa por ciento de los libros que se venden en el año son de ficción.
El noventa por ciento de los libros que se escriben al año son de no ficción.
Lo mismo aplica para las películas y la televisión: la ficción le gana a la no ficción 10 a 1.
La no ficción es hechos y números, problemas y procesos, consejos y técnicas.
La ficción es personas interesantes llevando vidas fascinantes.
La no ficción es la realidad y la realidad es un bisonte cautivo en un zoo.
La ficción es escaparse del zoo y aventurarse en lo salvaje.
La buena escritura proyecta una película mental sobre la pantalla de la mente.
¿Las películas que escribes se tratan de personas en un zoo o de personas libres? ¿La gente en tus anuncios son vacías y huecas como animales en el zoo o son vívidas y reales como personas que conoces?
Henry David Thoreau nos dijo: “La masa de hombres lleva vidas de desesperación callada y se va a su tumba con la canción aún por dentro.”
Si quieres tocar la desesperación callada en el corazón de tu cliente, escribe anuncios que describan su dolor y frustración y luego ofrece liberarlos de ellos.
Si quieres tocar la canción que tienen por dentro, escribe anuncios que hablen de libertad, realización y felicidad. Enséñales la vida fascinante que pudieran estar viviendo.
Un anuncio bien escrito proyecta una película mental sobre la pantalla visual-espacial de la memoria de trabajo, la pantalla de la mente, ubicada en el área de asociación dorsolateral prefrontal.
En papel, sobre una pantalla de computadora, una valla, o saliendo de las bocinas de una computadora, una televisión o radio, son las palabras, palabras, palabras, palabras, palabras, palabras, palabras, las que crean esas películas mentales.
Las reseñas en línea son poderosas.
Las reseñas en línea no son hechos ni lógica.
Las reseñas en línea son las impresiones y reacciones de las personas.
Las impresiones y reacciones son mucho más interesantes que los hechos y la lógica.
Cuando una persona describe sus impresiones y reacciones, están proyectando una película sobre la pantalla de tu mente.
P.: ¿Me estás diciendo que debería usar los testimoniales de clientes en mis anuncios?
R.: NO, porque no vas a poder resistirte de editar los testimoniales de tus clientes y en el momento en que los tocas, esos testimoniales se convierten en anuncios predecibles dichos por un muñeco de ventrílocuo.
P.: ¿Por que los escritores de anuncios suponen que al público le interesan los hechos y la lógica?
R.: La mayoría de escritores de anuncios sigue las reglas del periodismo cuando deberían seguir las reglas de la escritura de guiones.
Los periodistas entregan hechos. Los guionistas entregan fascinación.
Sigue brillando, guionista, sigue brillando.
Roy H. Williams