El que lo olió, se lo tiró
Si no entiendes el título del memo de hoy, simplemente pregúntale a un niño de 12 años.
Con un título como “El que lo olió, se lo tiró”, ¿te sorprende que el memo de hoy se trate acerca de una herramienta de administración comprobadísima?
Hace unos días, mi socio Tim Miles hizo una brillante sugerencia acerca de cómo podemos comenzar la clase Crecimiento de Negocios de tres días que vamos a tener en marzo. (Lo siento, estamos completamente llenos.)
Escuché acerca de la idea de Tim cuando me hicieron una pregunta de obtención de fondos del director del grupo de El Mago de la Publicidad. Tim había sugerido algo realmente asombroso. Caro, pero asombroso.
Le envié un correo a Tim. “¡Fantástica idea Tim! Tú estás a cargo.”
TIP: Siempre asígnale la responsabilidad de darle seguimiento a las cosas a la persona que tuvo la idea. Dale la diversión de perseguir el conejo al perro que descubrió en dónde estaba escondido. (En esencia, el que lo olió, se lo tiró.) ?
AQUÍ EL POR QUÉ:
1. Nadie más va a tener la misma visión en su mente o entusiasmo en su corazón.
2. Nadie tiene más qué ganar – o perder – que la persona que tuvo la idea.
BENEFICIO EXTRA: Se va a correr la voz y eso va a hacer que la gente se lo piense dos veces antes de decirte todas las cosas que “TÚ” deberías hacer.
Cuando estábamos construyendo los edificios de la Academia del Mago y un grupo de personas llegaba al campus, por lo menos una de ellas me halaba hacia un lado y me decía todo emocionado: “Esto es lo que deberías hacer…”
PROBLEMA: They asked how much money they could spend and I said, “As much as you can raise.”
Yo ya estaba más ocupado que un hombre con una sola pierna en un concurso de patear traseros, más estresado que un gato de cola larga en un cuarto lleno de mecedoras y más tenso que una rana en una autopista sin poder saltar. Así que un día impulsivamente le di la mano a la persona que había hecho la sugerencia y le dije: “¡Qué buena idea! ¡Tú estás a cargo!”
Asombrosamente, obtuvieron el dinero, refinaron la idea y la ejecutaron hasta el final.
Cuando vi que tan bien les había salido la idea, me dije a mí mismo: “Anota esto: haz esto más seguido.”
Cuando mi socio Tim recibió mi correo, respondió un poco en broma: “Vaya, con el tiempo que llevo aquí, realmente debí haber visto esto venir.”
Digo “un poco en broma” porque Tim ha hecho numerosas sugerencias a través de los años y siempre ha estado dispuesto a tomar completa responsabilidad por su implementación.
“¡Buenísima idea! ¡Tú estás a cargo!” es uno de los principios guías de los socios de El Mago de la Publicidad. También se ha vuelto una tradición en la Academia del Mago.
Te sugiero que pruebes esta técnica en tu propia compañía.
Es la forma perfecta de determinar si estás rodeado de las personas correctas.
Roy H. Williams
