¿Tienes Una Isla Desierta?

¿Tienes Una Isla Desierta?

2014_65_Academy-Campus-Map_740

¿Tienes Una Isla Desierta?

Phil tenía casi 70 años cuando lo conocí hace 30 años. Dentro de poco va a tener 100 años. Phil no lo sabe, pero lo considero como una de las personas que me dice cosas sabias en mi vida.

¿Tienes una palabra favorita? La palabra favorita de Phil es balance.

La mayoría de nosotros estamos fuera de balance y sufrimos por ello.

Pensamos que estamos en peligro de sufrir cosas malas, pero esas cosas malas rara vez se materializan. Nuestro problema es que nos sacamos de balance por nuestra fuerte atracción a las cosas buenas.

Tú eres ingenioso. Terminas cosas. Eres una persona que tiene logros. Nunca vas a quedar destruido por aquéllos que se interponen en tu camino y tratan de empujarte hacia atrás. 

El peligro viene de aquéllos que se paran detrás tuyo y te empujan hacia adelante. “¡Vamos! ¡Vamos! ¡Vamos! ¡Ya casi llegas! ¡Sólo un poco más! ¡Tú puedes! ¡Bravo! ¡Eres lo máximo! ¡Sigue así! ¡Sin dolor, no hay ganancia! ¡Tú puedes! ¡Súper!”

Está en nuestra naturaleza llevar algo bueno demasiado lejos.

Una ética de trabajo fuerte es algo bueno. Cada workajólico desbalanceado tiene una.

La compasión es algo bueno. Cada ministro quemado lo sabe.

El reconocimiento es algo bueno. Sólo pregúntale a cualquier celebridad que se ha olvidado de quién es.

Leemos en la Biblia que Jesús frecuentemente dejaba a las multitudes a las que les estaba enseñando y se desaparecía en el desierto. Suspecho que se juntaba con Lázaro – el hermano de María y Martha – durante esos momentos porque a Lázaro le importaba más Jesús el hombre que Jesús el hacedor de milagros. Yo creo que tal vez Lázaro era una persona “segura” para Jesús, o sea que no pedía nada de Jesús y que es por eso que Jesús lloró cuando se había marchado Lázaro y por eso fue que lo llamó de regreso de la tumba.

Por lo menos así es como sucede en el guión que estoy escribiendo.

Todos necesitan un desierto en el cuál desaparecer. Necesitan personas seguras con quiénes juntarse, amigos que no demanden nada de ellos.

Aunque oficialmente llamamos a la Academia del Mago “una escuela para los imaginativos, valientes y ambiciosos”, nuestros estudiantes la han llamado entre risas “un campamento de verano para adultos” desde el día que la lanzamos hace 14 años. Últimamente he estado pensando que ellos pueden tener razón. De hecho, la hemos comparado tantas veces con la isla del Nunca Jamás de Peter Pan que nuestra próxima mansión de estudiantes va a llamarse oficialmente “La Casa de los Niños Perdidos”.

En serio, no me lo estoy inventando.

Me gusta creer que la Academia del Mago es la isla desierta en la que Jesús hubiera descansado con Lázaro cuando necesitaba alejarse de las masas opresivas. Y me gustaría creer que aquí es a dónde vas a venir cuando tú necesites hacer lo mismo.

Y una última cosa: de acuerdo con Robert Louis Stevenson, ésta es la isla en donde está enterrado el tesoro.

Ven, veamos si lo podemos encontrar.

Roy H. Williams

Comments are closed.