“Si el fundador de una organización no le da poder a la próxima generación de líderes para que puedan impulsar a la empresa hacia adelante mientras él aún es un líder viable, la organización que él fundó va a dejar de existir en los próximos 10 años después de su muerte.”
No recuerdo cómo aprendí esa información, pero la he sabido desde hace 40 años. La fe que tengo en su veracidad me dice que yo confiaba en la fuente.
Estaba trabajando en una tienda de fabricación de acero en Broken Arrow, Oklahoma por 3 dólares y 35 centavos la hora cuando aprendí una segunda verdad que no puedo probar, pero recuerdo el episodio claramente. Era el año 1976, cuando un millón de dólares eran como diez millones de dólares de hoy.
Estaba escuchando una entrevista en la radio mientras manejaba un camión de entregas por la Lynn Lane, el hombre en la radio había enviado una encuesta por correo a un gran número de millonarios y un promedio sorprendentemente alto de ellos completó esa encuesta y se la devolvió.
Él estaba compartiendo las características de los millonarios que se habían hecho a sí mismos:
“¿Los millonarios auto-hechos tienen un C.I. alto? No. El porcentaje de millonarios auto-hechos con un C.I. alto es el mismo que el de la población general.”
“¿Será la educación? No. Los millonarios auto-hechos no están mejor educados que el resto de nosotros.”
“¿Será el dinero de familia? No. Los millonarios auto-hechos no vienen de familias con más dinero que la tuya y la mía.”
“¿Serán las conexiones familiares? No.”
“¿Muchos de ellos se casaron con alguien con dinero de familia y conexiones? No.”
“¿Los ‘descubrieron’? ¿Tuvieron un golpe de suerte? No.”
Cuando todas mis suposiciones se despedazaron, él dijo que sólo hay cuatro cosas que los millonarios auto-hechos tienen en común:
(1.) Es más probable que a los millonarios auto-hechos los hayan despedido de un trabajo que al resto de nosotros.
(2.) Un alto porcentaje de millonarios auto-hechos se ha declarado en bancarrota al menos una vez.
(3.) Los millonarios auto-hechos desconfían de la sabiduría tradicional y creen que existe un mejor camino.
(4.) Los millonarios auto-hechos piensan más adelante que nosotros. Ellos tienen un horizonte de tiempo que no se mide en días o semanas o meses, sino en años.
El hombre invisible en la radio continuó diciendo que el nivel socio-económico de una persona es mayoritariamente determinado por qué tan lejos hacia el futuro puede pensar esa persona.
La persona promedio tiene un plan para su próximos dos cheques de sueldo. El próximo cheque ya está comprometido en su totalidad y tienen cuentas qué pagar con el cheque que le sigue, aunque ese les ofrece una pequeña oportunidad para gastar discrecionalmente. El cheque que sigue al próximo nos da un poco de esperanza.
Dos cheques en el futuro es lo más lejos que nos atrevemos a ver. Esto es lo que significa ser de clase media.
Pero al menos no estamos luchando por encontrar el dinero para comprar una nueva batería para el carro para poder ir al trabajo o tratando de pedir prestado dinero para pagar una cuenta de luz que lleva tiempo morosa o deseando que tuviéramos suficiente comida en la cocina que dure hasta el siguiente cheque. Estas personas están luchando, pero ese no es el fondo. No.
En el fondo del nivel socio-económico están los adictos que sólo pueden pensar en el siguiente trago, la siguiente jeringa, la siguiente pastilla. Su horizonte de tiempo es de unas horas, como mucho. El mañana no existe en sus mentes.
Amigo, estoy convencido que puedes tener éxito en cualquier cosa que escojas hacer, siempre y cuando tengas el poder de perseverancia emocional que sobreviva a tus errores.
No importa qué tanto trates, existen un cierto número de errores que vas a cometer. Esto no quiere decir que tú hayas fracasado. Quiere decir que estás aprendiendo.
Así que siempre sigue tratando. Pero, sobre todo:
Piensa hacia adelante.
Roy H. Williams
P.D.: “Lo que autores famosos, atletas de primer nivel, titanes de los negocios, cantantes, actores y personas exitosas en cualquier campo tienen en común es que todos ellos comenzaron sus travesías cuando no eran ninguna de esas cosas.”
— Mike Dooley
“Warren Buffett lo dijo mejor: ‘Si quieres ganar en el juego de las inversiones, tienes que entender paciencia, porque la riqueza usualmente se transfiere del impaciente al paciente.’ El noventa y nuevo por ciento del valor total neto de Buffett lo acumuló después de cumplir 65 años. Si Buffett se hubiera retirado a los 65, nunca hubieras escuchado hablar de él.”
– Morgan Housel (al día de hoy, el valor total neto de Buffett se calcula en US$132 millardos.)