Herbert y la Corrida de Toros

Herbert y la Corrida de Toros

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Herbert y la Corrida de Toros

Agnes De Mille escribió una vez:

“Ninguna trompeta suena cuando se toman las decisiones importantes en nuestras vidas. El destino se da a conocer en el silencio.”

Agnes tenía razón acerca de casi todo, pero estaba completamente equivocada acerca de Herbert.

Herbert esculpe y pinta. El expresionismo abstracto es lo suyo.

“Es como el jazz,” dice él. “El arte es un sentimiento. Me gusta viajar a un mundo en donde no existen las palabras.”

Edgar “Yip” Harburg, el escritor que hizo la letra de la soñadora “Somewhere Over the Rainbow” para Judy Garland, una vez hizo una observación similar:

“Las palabras te hacen pensar pensamientos.

La música te hace sentir sentimientos.

Pero una canción te hace sentir un pensamiento.”

Pero nos estamos adelantando.

La historia de Herbert y la corrida de toros comienza en 1930, cuando Louis, un sastre judía ucraniano que tocaba la mandolina, llega a los Estados Unidos y se enamora de Tillie Goldberg en el Lower East Side de Nueva York. 

Se casan, mudan a Los Ángeles y tienen dos niños y una niña.

En 1955, David el primer hijo es un reconocido bateriísta y el segundo hijo Herbert es un trompetista en la banda marcial de USC. La hija Mimi está aprendiendo a tocar el piano.

En 1962, Herbert está en el garage grabando una canción de trompeta llamada “Twinkle Star”, cuando decide tomar un descanso y manejar a México. Él contó la historia recientemente en CBS Sunday Morning:

“Tijuana tenía unos matadores de primera clase y esta sección de trompetas en las gradas, ya sabes, ellos anunciaban los diferentes programas, los diferentes eventos en la corrida. “¡Ta-dahh! ¡Pa-Da DATTLE-DA-DATTLE Da-Dahh. Se me puso la piel de gallina de todo eso y traté de traducir los sentimientos de esa tarde a una canción.”

Herbert regresa a casa, le pone sabor a “Twinkle Star” con el suave y picante aroma de la tarde en Tijuana y le cambia el nombre a “El Toro Solitario”.

Envía su grabación a algunas estaciones de radio y la canción se convierte en un éxito.

Alentado, Herbert contrata a algunos otros músicos para que toquen con él. Su jazzozo y exótico sonido se describe frecuentemente como “repetición simpática y latina,” por lo que es fácil entender por qué todo el mundo piensa que Herb y sus amigos son hispánicos. Pero ni uno de ellos tiene una sola gota de sangre española corriendo por sus venas. Herb describe su grupo como “cuatro lasagnas, dos bagels y un queso americano.” La audiencia los conoce como “Herb Alpert and the Tijuana Brass.”

En 1966, ellos vendieron más discos que los Beatles.

Herbert llega a ganar cinco éxitos No. 1, 15 discos de oro, 14 de platino y ocho Premios Grammy. Nadie sino Herb ha tenido 4 discos en el Top 10 de forma simultánea. 

Setenta y dos millones de discos vendidos es un número respetable, ¿verdad?

Pero Herbert apenas está comenzando.

Inmediatamente después del éxito de El Toro Solitario, él convence a Jerry Moss a convertirse en su socio. Alpert y Moss producen y distribuyen sus fantásticamente exitosos discos de Tijuana Brass bajo su propia etiqueta, A&M.

En 1969, Herb descubre un dúo de hermano/hermana que también se convierten en fantásticamente exitosos: Richard y Karen Carpenter.

Pronto, A&M están produciendo 400 grupos y artistas diferentes, muchos de los cuales ven estrellas alinearse para escribir sus nombres en el cielo de la noche.

En 1989, Herb vendió A&M Records a Poygram por 500 millones de dólares.

Y todo comenzó

con el hijo de un sastre ucraniano

que decidió sacarse de su zona de comodidad

y hacer un viaje en carro a México.

Roy H. Williams

Austin, Tejas no es México, pero el lugar que quiero que visites definitivamente va a hacer que brilles cuando caminas. Por cierto, tengo una madriguera del conejo súper cool y la de la semana siguiente es aún mejor. Ya vas a ver. Haz clic sobre la imagen del principio de esta página y entras. Cada imagen te lleva a otra página. Pero queda advertido: si vas demasiado profundo, las cosas se ponen extrañas. – Indiana Beagle

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